El fútbol paraguayo se encuentra convulsionado a raíz de todo lo sucedido en el club Rubio Ñu de Luque, elenco que milita en la cuarta división, tras la filtración de una foto en la que aparece Antonio González, presidente del equipo, y Bernardo Gabriel Caballero, uno de los futbolistas, desnudos en una cama.
El máximo directivo realizó un efusivo descargo en Facebook, en el que afirmó que ambos eran pareja y que su joven jugador ahora mantendría una relación sentimental con su nuevo representante (Valentín Ozuna), quien lo sacó de la institución y ahora reclama su ficha.
Tanto el agente como el deportista afirmaron que González «obligaba al jugador a mantener relaciones sexuales con él», lo que agravó la situación.
«Hay una investigación fiscal que se inició para esclarecer si existen menores de edad a cargo de esta persona tan publicitada», señaló Martínez en diálogo con el diario La Nación de Paraguay, en referencia al presidente de la institución.
La funcionaria judicial buscará esclarecer si es cierto que algunos futbolistas fueron obligados a realizar ciertas actividades para poder jugar y si hay una coacción sobre ellos para abandonar el club.
«Vamos a investigar si se da una situación de trata de personas con fines de explotación laboral. Nos abocamos sobre todo si están o no menores de edad», comentó. Vale mencionar que Antonio González expresó que actualmente en el plantel cuenta con una mayoría de juveniles de entre 17 y 16 años.
Para concluir, Martínez afirmó: «Esta situación que tomó estado público es escandalosa porque hay una situación de coacción sexual. Oficiosamente tenemos que investigar, más aun cuando se habla de que podrían existir menores de edad en esa situación».
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