Para un acuerdo, el Fondo impondría «condicionalidades» y podría ser de U$S 22.500 millones

Los expertos aseguran que Argentina podría acceder a una «Línea de Crédito Precautoria», que impone más condicionalidades e intromisiones de los técnicos del FMI que las «Líneas de Crédito Flexibles» a las que accedieron México y Colombia. El Fondo querrá monitoriar el déficit fiscal y de cuenta corriente, justamente para ver que se corrigan las «vulnerabilidades» de la economía argentina. Hasta ahora, sólo dos países usaron estos créditos: Macedonia y Marruecos, que integran la B de los países emergentes. Sería la primera vez para un miembro del G-20.

Los expertos dicen que Nicolás Dujovne no podrá conseguir en Washington una Línea de Crédito Flexible (Flexible Credit Line, FCL) con el FMI, que supondría menos condicionalidades por parte del organismo, tal la que solicitaron en los últimos años Mexico o Colombia. La FCL es una línea diseñada para países, según lo explica el reglamento del Fondo, con “sólidos fundamentos económicos y un historial de cumplimientos con el organismo.

El economista Alberto Ramos, del banco Goldman Sachs, escribió un reporte para sus clientes en el que explica que “no está claro que Argentina pueda calzar en esa descripción”. “Si bien las autoridades son ortodoxas y amigables para el mercado, los fundamentos de la economía argentina difícilmente puedan ser considerados sólidos. Esto es: una inflación del 25%, un tipo de cambio sin anclaje, un nivel de tasa de interés interna insostenible, y déficit gemelos (fiscal y de cuenta corriente) muy altos, no parecen ajustarse al molde un país con sólidos fundamentos”, explica. “Después de todo, parte de la reciente corrida financiera es en sí misma un reflejo de vulnerabilidades pre-existentes y de fundamentos débiles”, agrega.

Así las cosas, para el analista de Goldman Sachs, “si los fundamentos de la economía argentina están lejos de ser sólidos (necesitan repararse, Sic.), tal vez la línea de crédito que mejor se ajuste para Argentina sea la Línea Precautoria de Liquidez” (Precautionary and Liquidity Line, PPL). Esta línea de créditos tiene un menor nivel de exigencias en cuanto a la solidez de la economía, pero tiene mayores condicionalidades por parte del Fondo Monetario que, justamente, querrá monitorear que se resuelvan “las vulnerabilidades macro” que tiene identificadas el organismo para Argentina. Dicho de otro modo: Argentina podría calificar para este programa, pero “las condicionalidades son más intrusivas en la política económica doméstica y menos flexible en el uso de los recursos que el FCL”.

El informe de Goldman advierte que “la revisión de estas condicionalidades ex post tal vez no sean neutrales políticamente dada el reciente historial de las relaciones entre Argentina y el FMI”

Hasta ahora, sólo dos países han accedido a una línea de crédito precautoria: la ex república Yugoslava de Macedonia y Marruecos. Lo que se dice países emergentes que juegan en la primera B de los mercados financieros. No un país que integra el G-20.

Las condicionalidades del Fondo serían de dos tipos, para achicar el déficit fiscal y de cuenta corriente del Balance de Pagos, que actúan en espejo. Por un lado, exigirá pisar el acelerador en el ajuste fiscal, porque los técnicos del FMI descreen de las metas de reducción del déficit de Dujovne. Consideran que el ritmo propuesto por el Gobierno supone una necesidad de endeudamiento demasiado elevada por los próximos 6 años para cubrir el bache (ver: https://www.infobae.com/economia/2018/05/09/un-intento-incierto-y-desesperado-por-evitar-un-horrible-plan-b/)
Por otro lado, si sigue sin aparecer una oferta privada de dólares abundante, probablemente reclamen un tipo de cambio más alto, para forzar un cierre más rápido del déficit del sector externo.
¿Cuánto podría poner a disposición el Fondo para Argentina?
Los acuerdos por PLL pueden ser por 6 meses, 1 o 2 años. Para los arreglos de 1 o 2 años, el máximo de financiamiento es igual al 250% de la quota del país en el Fondo para el primer año y del 500% para el total del arreglo.

En el caso de Argentina, la quota (valuada en Derechos Especiales de Giro, la moneda del FMI) es equivalente a U$S 4.500 millones. Así que, como máximo, Argentina podría acceder a unos U$S 22.500 millones: la mitad en el primer año y el resto en el segundo. El monto total podría ser adelantado para el primer año, pero siempre que sea aprobado por el Directorio del organismo, previo un monitoreo de los técnicos del FMI.

Por Maximiliano Montenegro.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


*