El senador nacional José Mayans expuso un duro análisis del propósito del gobierno nacional, que “carentes de una mirada federal” y basándose en “la figura del estado como aguantadero” y de que “el problema en el país son los trabajadores, tienen en la mira a los empleados públicos provinciales”.
Ante esta maquinación es que consideró necesario recordar el sistema de gobierno que adoptamos: “republicano, representativo y federal, que las provincias tienen autonomía y son quienes deciden sus propias políticas públicas”.
Fundamentó su afirmación, que considera será la arremetida a dar en caso de que triunfe el oficialismo nacional en los comicios de este año y como parte de la “segunda etapa y aún más brutal ajuste”, recordando que fue miembro informante del presupuesto nacional en el seno de la Cámara Alta, y en ese marco señalo que analizó cifras y definiciones políticas: “El presidente habla de que el estado es un aguantadero donde sobran un millón y medio de trabajadores”.
Y como el estado nacional tiene 750 mil empleados, queda claro que se está hablando de los trabajadores de las provincias”.
Otra señal clara según expuso Mayans, fue que en el “Mini-Davos” que se organizó en Mar del Plata se “llegó a la conclusión de que el gran problema del país son los trabajadores”.
Expuso que “vemos a formoseños en funciones públicas desfilar por la televisión porteña diciendo que el 90% de nuestros habitantes dependen del estado nacional. Mentira atroz y falta de respeto a tantos industriales, comerciantes, productores y de muchas otras actividades que con enorme esfuerzo tratan de llegar a un mejor porvenir en todo el territorio”.
Cuantificó que “sobre más de 600 mil habitantes en la provincia de Formosa hay cerca de 45 mil empleados públicos. De ese total, la mitad son docentes, hay también un gran número de trabajadores de la salud y de la fuerza policial, y el resto brindando servicios esenciales al servicio del pueblo en diferentes áreas”. Lamentó el senador que “nada dicen de las escuelas, hospitales, centros de salud y otras infraestructuras en materia de energía eléctrica, agua potable, entre muchas otras, para una mejor prestación de servicios esenciales que se han incorporado y que ineludiblemente requieren de recursos humanos para funcionar”.
Otro signo esta dado en que “eliminaron más de 3000 pensiones en la provincia”, afirmó. Puso como ejemplo de uno de los afectados a “una persona que nació en Paraguay pero vino a residir a Formosa a los 8 años y por supuesto tiene documento argentino, hizo toda su vida aquí, tiene siete hijos nacidos en Formosa. Le dijeron que para recobrar la pensión debe presentar los papeles de casi setenta años atrás de cuando ingresó al país, una locura, ya que si quiera a su hijo mayor que tiene 50 años le puede contar como eran aquellos tiempos agrestes y tan difíciles”.
“Lo que viene será aún más brutal”
Subrayó el senador que “ahora viene la segunda etapa de un ajuste aún más brutal, ya que están decididos a llegar de la forma que sea a la meta que se han trazado. Después de las elecciones, más tarifas, mas ajustes, cesantías y acentuar la deuda pública del país”.
Para Mayans, “la cura para esto es el voto. No se trata de una pugna entre radicales y peronistas, esta es por algo de mucha mayor gravedad porque se trata de defender la nación, y una buena opción es este modelo provincial”.
Alertó que “la condición del gobernador Gildo Insfrán de ser un luchador de primera contra tantas injusticias, hace que lo sitúen como enemigo, recrudecen los ataques mediáticos por todos los medios, las redes sociales, la televisión y diarios, donde se enrostra descalificativos de todo tipo”.
Marcó el contraste entre el “modelo formoseño para el desarrollo provincial”, y el plan del gobierno nacional al cual bautizó como “sálvese quien pueda”, nombre que entiende se ajusta “a partir de los brutales aumentos de las mercaderías y demenciales tarifazos. Esto a partir de un sistema económico al estilo Antón pirulero, cada uno atiende su juego, el área finanzas por un lado, el de economía por el otro, el Banco Central hace lo suyo”.
Afirmó finalmente que el plan nacional “está haciendo agua por todas partes y lo más grave, el endeudamiento brutal en poco más de un año y medio, con el gran beneficiado que es la usura”.
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