
“EL FRÍO LLEGÓ PARA QUEDARSE”
Formosa ya está con temperaturas bajas tras el ingreso de una masa de aire polar. Consultado por La Mañana, Fernando Alegre, meteorólogo de la Estación Meteorológica de Las Lomitas, afirmó que “el frío llegó para quedarse”, marcando el inicio de la transición entre el otoño y el invierno.
“Pasó un frente frío con vientos fuertes el martes”. Esta masa de aire desplazó un sistema de presión que estaba en el océano Atlántico, que estuvo trayendo humedad y calor durante más de un mes. Ahora, un sistema de alta presión en el centro del país trajo viento del Sur, cielos parcialmente cubiertos a despejados y un marcado descenso de temperatura”, explicó.
Para el jueves, el meteorólogo pronosticó condiciones con cielo parcialmente cubierto a despejado, viento del Sur y una mínima de 6°C, que podría descender a 4 o 5°C en áreas suburbanas. “El viernes seguirá fresco, con mínimas de 6 o 7°C y máximas de 16 a 17°C. Durante el fin de semana, las temperaturas matutinas no superarán los 8 o 9°C, pero en la siesta podrían alcanzar los 20 o 22°C”, agregó, destacando que las condiciones permitirán “sentarse a comer mandarinas al sol”.
Alegre descartó la posibilidad de heladas significativas en la capital: “La masa de aire frío recién está ingresando, y para que haya heladas se necesitan condiciones específicas, como más de 10 días con temperaturas mínimas y máximas por debajo de 15°C y vientos del Sur sostenidos. Podría haber alguna helada ocasional en zonas suburbanas, pero lo dudo”. Explicó que las ciudades, como Formosa, generan un efecto térmico que mitiga el frío extremo, a diferencia de áreas rurales donde la temperatura puede sentirse más baja.
Consultado sobre rumores de una “ola polar sin precedentes” que circulaban en redes sociales, Alegre fue contundente: “Siempre hay que verificar la fuente. Si no dice ‘Servicio Meteorológico Nacional’ o una entidad confiable, no es creíble. Lamentablemente, no hay una ley que regule los pronósticos, y cualquiera puede generar información falsa que se viraliza. Esto hace que la gente se asuste o, peor, que ignore alertas reales por descreer tras tantas noticias falsas”.
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