Ocurrió este jueves a la madrugada en el paso fronterizo San Ignacio de Loyola. Al igual que en un procedimiento realizado horas antes, la droga también era trasladada en un camión de carne de origen paraguayo.
Personal de Aduana secuestró este jueves un segundo cargamento de cocaína, a pocas horas de haber detectado al primero en el mismo lugar: el paso fronterizo San Ignacio de Loyola. Esta vez fueron 134 kilos de la droga, que al igual que en el primer caso, era trasladada en un camión paraguayo que llevaba carne congelada.
El procedimiento se realizó este jueves a la madrugada, cuando los trabajadores aduaneros realizaban el control vehicular y detuvieron a un camión térmico que llevaba carne congelada.
Se sometió al vehículo a una verificación con imágenes de escáner, también con intervención del equipo de binomios (personal y perros entrenados) y una verificación manual exhaustiva.
Esto permitió hallar el cargamento de cocaína, que totalizó 134 kilos, que tenían como destino a Chile.
Primer caso
Este fue el segundo cargamento detectado, que completó un total de 269 kilos de cocaína secuestrada en el mismo punto fronterizo y que era trasladada con la misma modalidad.
El miércoles por la tarde, los aduaneros detectaron 135 kilos de la misma droga, también oculta en un camión térmico.
Siguiendo la ubicación revelada por las imágenes del equipo, los funcionarios encontraron gran cantidad de panes o ladrillos de cocaína, prolijamente envueltos en papel de aluminio, que fueron secuestrados en el acto, sumando un total de 135 kilos. El chofer del camión fue detenido por orden del juez Federal de turno.
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