El integrante de la comisión directiva de la Seccional Formosa de la Asociación Bancaria Argentina, contador Víctor Gómez, recordó que hoy no habrá atención en los bancos, ni en la provincia ni en el resto del país, por ser jornada no laboral por el Día del Trabajador Bancario.
Gómez comentó que sí funcionarán los cajeros automáticos y que a partir de mañana la atención a los clientes de las diferentes entidades bancarias volverá a la normalidad.
Explicó que de acuerdo a la Ley N° 20.744 de Contrato de Trabajo, el artículo 167 dispone que en los días no laborables, el trabajo será optativo para el empleador, “salvo en bancos, seguros y actividades afines” y por esa razón no abrirán las entidades, y estará disponible sólo el uso de los cajeros automáticos.
Remarcó que otro logro del gremio bancario es la continuidad del pago del bono por el Día del Trabajador Bancario, cuya cifra oscila según el nivel jerárquico y la antigüedad del empleado, de entre 51.000 pesos y 83.000 pesos.
“Ayuda mucho a la economía familiar porque estamos hablando de un sueldo más y los trabajadores bancarios estamos muy agradecidos por eso. Hay que decir también que el sector bancario fue el más beneficiado todos estos cuatro años del Gobierno nacional de un modelo económico especulativo”, agregó.
Por otra parte, aclaró que el bono por fin de año, o cierre de actividad, aún no se definió y es una cuestión que tendrá que resolverse en el seno de las distintas cámaras que nuclean a las entidades bancarias y entendió que las respuestas llegarán tras la asunción del nuevo Gobierno nacional.
“Cualquier aumento salarial o acuerdo de bono juegan de la mano de la situación inflacionaria. También nos consideramos actores principales porque nuestro secretario general de la Asociación Bancaria Argentina, Sergio Palazzo, fue un colaborador directo de este nuevo Gobierno que se vendrá a partir del 10 de diciembre. En este marco, creemos que se pueden dar incrementos de sueldo y bonos dentro de un pacto social que involucre a los diferentes sectores. No tiene sentido dar aumentos salariales si antes de que se apliquen los empresarios ya están remarcando los precios de sus productos. Eso no es sano ni para los trabajadores ni para cualquier economía familiar porque se ve absorbido por la inflación. Todo incremento salarial debe ser una mejora real del poder adquisitivo”, concluyó.
Fuente: La Mañana.
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