Ignacio Irbazábal, Director Ejecutivo del Observatorio Argentinos por la Educacion, en diálogo con el Grupo de Medios TVO habló sobre un estudio realizado que coloca a la provincia de Formosa como una de las que menor cantidad de días de paro realizó desde el regreso de la democracia en el año 1983 hasta el 2018 con un promedio anual de 6 días sin clases.
«Nosotros encontramos que desde 1983 hasta 2018, se perdieron en promedio 12 días o hubo 12 días de paro de promedio nacional por año lo que le da en los 35 años poco menos de 500 días de paro, que es una situación para prestar atención y lo que encontramos en la provincia de Formosa según este estudio es que el promedio en este período fue de 6 días, es la mitad del promedio nacional», destacó.
«Hay un tema que es interesante y es importante resaltar que es que muchas veces se habla de días de paro porque son más fáciles de contabilizar que otras causales de pérdida de días de clase pero es importante a tener en cuenta que en Argentina se pierden clases por muchos otros motivos, por ejemplo, problemas de infraestructura, fallas en el gas, la electricidad, el agua, ausentismo de estudiantes, ausentismo docente, a veces los calendarios de las distintas provincias no tienen en cuenta las jornadas de capacitación o planificación entonces es como que arranca el año y ya no se pueden cumplir los 180 días de clases, más allá del número promedio de paro, hay que tener en cuenta que en Argentina no se cumple la ley de los 180 días de clases que existe desde el año 2003 y es muy importante que reaccionemos para cambiar esto porque o sino normalizamos el ciclo lectivo y es muy difícil ponernos otros tipos de objetivos», explicó.
De la misma forma señaló que, «el autor del informe habla de que hay evidencia de que dentro de un mismo país cuando hay más días o más horas de clase, eso se asocia con mejoras en los desempeños, el problema en Argentina no es que haya estructurado pocos días de clases, se podría subir a 200 días de clases como hay en muchos países de la región y del mundo, pero tenemos un problema más grave de que no se cumplan esos 180 días y es que además hay interrupciones erráticas, no es solo que el año pasado en Formosa se perdieron unos 9 días de clases por paro, sino que estos días se pierden discontinuadamente y disrupcionan la carencia del año escolar, por poner un ejemplo, es como cuando uno se pone el objetivo de ponerse en forma y dice que va a salir a correr 3 veces por semana por 3 meses y después en vez de salir a correr todas las semanas, sale una sí y una no, lo mismo pasa con un estudiante o un docente que tiene que aprender a enseñar, una cosa es saber que voy a tener fijo 3 o 4 clases de matemáticas por semana y otra cosa es empezar cada semana sin saber si va a haber un paro o va a faltar agua o se va a caer la parte de un techo entonces lo que necesitamos es normalidad en el ciclo escolar para empezar y un poco lo que pone la gente en ese informe, lo que los datos alumbran por sí mismos es que tenemos que prestar atención a esta situación porque si queremos realmente darle a los estudiantes la educación que merecen, tenemos que garantizar este mínimo de 180 días».
Para finalizar contó de dónde sacaron estos datos. «Esto surge de un informe de un centro de investigación muy prestigioso que queda en La Plata y también de datos de una consultora que contabiliza a través de notas periodísticas y de otras formas los paros por provincia. Un dato interesante es que este informe es concretamente sobre los paros en primaria porque con esta metodología es más fácil cuantificar que los de secundario», culminó.
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