«Siento una alegría tremenda», enfatizó el ingeniero, Aeronáutico Emilio Giménez, de la localidad de Clorinda queformó parte del equipo que desarrolló el Satélite Argentino de Observación con Microondas (SAOCOM), impulsado por la CONAE junto a la empresa estatal rionegrina INVAP y otros organismos.
«Soy de Clorinda, tengo 32 años. Cuando termine la secundaria me fui a estudiar a Córdoba donde me recibí y sigo trabajando, en la CONAE. Todos los que trabajamos en la fabricación de la antena Sar son todos jóvenes profesionales», detalló.
A su vez contó que se desempeña dentro del «Área de Control Térmico», que se encarga desde el diseño hasta los cálculos y el control de cada una de las partes del satélite y sobre todo la antena que es a lo que nos dedicamos acá, que según las condiciones que esté en el espacio aguante toda la vida a nivel térmico. Este sería uno de los niveles que hay que tener en cuenta, una de las condiciones extremas».
Seguidamente, señaló que como parte del Control Térmico me ha tocado hacer un poco de todo, me tocó ingresar al lugar hace cinco años dónde gran parte de los laboratorios que todavía no eran lo que llegaban a hacer hoy, es decir no estaban preparado para la construcción, entonces nosotros también participamos diseñando gran parte de los laboratorios y los dispositivos que utilizaríamos», y agregó que «el rol fundamental es la parte de integración, que sería como el ensamblaje y el testing».
El Ingeniero, resaltó que «esta Industria a diferencia de las otras tiene una particularidad que cuando vos producís algo la pieza producida no es el producto final, sino que para estar en condiciones de mandar al espacio necesita varios ensayos que demanda mucho tiempo».
«Como cualquier proyecto involucra un montón de factores; tiempo, dinero, la capacidad. Es una mezcla de muchas cosas, en algo de tan alto nivel como la industria aeroespacial», señaló.
Asimismo, Giménez remarcó que «esto posiciona muy bien a la Argentina en este tipo de industria. La CONAE ya había lanzado varios satélites antes, sin embargo, la trascendencia y lo que lo hace notable, es la fabricación y el nivel de tecnología que conlleva, porque las participaciones anteriores habían sido parciales o con instrumentos más pequeños».
En este sentido, contó que «la razón de llevar el satélite es la antena de 35 metros cuadrados, eso lo hicimos en Córdoba y el cuerpo del satélite se hizo en Bariloche. Esa tecnología la tiene la agencia espacial japonesa, y es algo que lleva mucho trabajo y es muy valioso. Lo posiciona al país muy bien en este tipo de industria».
El Ingeniero clorindense enfatizó que al ver despegar el Saocom A1, «sentí una alegría tremenda, fue increíble, uno en ese momento ve como un acontecimiento, pero cuando nos ponemos a pensar, le dedique a esto cinco años de mi vida a esto en la que pasó de todo, y al ver el fruto de eso realmente te pone muy contento».
Primer satélite diseñado y construido en el país
El subsecretario de Ciencia y Tecnología, ingeniero Julio Aráoz, destacó que el satélite SAOCOM 1-A, puesto en órbita desde el pasado domingo, «fue totalmente diseñado y construido en el país».
De tres toneladas de peso y fabricado íntegramente en el país, el SAOCOM 1-A servirá para generar sistemas de alerta temprana de inundaciones, elaborar mapas de riesgo de enfermedades de los cultivos, vigilancia del mar argentino frente a la pesca ilegal, y también para dar soporte a la gestión de emergencias ambientales.
Aludiendo al satélite SAOCOM 1A, el funcionario detalló que «tiene características muy especiales porque si comparamos con otros países sólo Japón logró alcanzar un nivel tecnológico para poder fabricar este tipo de dispositivos que son satélites radar que tienen la misión justamente de orbitar y objetivos específicos».
Entre ellos mencionó la observación de la superficie terrestre. «Dos veces por día pasa por encima del territorio argentino y tiene misiones como permitir tener alertas tempranas de inundaciones. También realiza la vigilancia de nuestro mar argentino, el cual permanentemente hay que vigilarlo por incursiones de buques que hacen pesca ilegal», puntualizó.
«También con la información que arroja se pueden confeccionar mapas para medir el riesgo de enfermedades que puedan afectar a los cultivos y si dentro del territorio hubiera una emergencia de ambiental se habilitaría un canal que permite gestionar emergencias ambientales», especificó.
Finalmente subrayó que «son misiones realmente importantes, que tienen un valor estratégico porque es incalculable para cualquier persona lo que significa tener una alerta temprana de inundación, los formoseños lo sabemos muy bien a eso. Y fue totalmente diseñado y construido en el país», concluyó.
Fuente. Diario Expres
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